¿Alguna vez has recibido un golpe en la boca? En caso de traumatismo dental resulta necesario acudir lo antes posible a la clínica para comprobar que todo está en orden. Ten en cuenta que este tipo de impactos pueden provocar heridas o contusiones, la luxación del diente, una fractura e, incluso, impedir que el diente salga por completo. ¡Evita daños mayores pidiendo cita en la clínica!
¿Qué hacer en caso de traumatismos? ¡Toma nota!
- Heridas o contusiones en la boca: pueden afectar al labio, la lengua o las mucosas. Después del impacto se debe lavar y desinfectar la zona, así como comprobar el estado de los dientes y del hueso.
- Luxación: en este caso, el golpe desplaza al diente de su alveolo haciendo que se mueva, aunque sin expulsarlo del todo. Es importante no usar colutorio, ni tocar el diente.
- Fractura: si el traumatismo ha roto un trozo de diente, hay que vigilar que no esté dañado el nervio. En estas circunstancias, se recomienda recuperar y conservar el fragmento de diente roto en suero salino, agua o leche. Si el traumatismo ha sido tan fuerte que ha expulsado el diente por completo se debe recuperar sujetándolo por la corona (nunca por la raíz) no limpiarlo, ni enjuagarlo y acudir, inmediatamente, al dentista.
En palabras de presidente del Consejo General de Dentistas, el Dr. Óscar Castro Reino:
“Todos los traumatismos dentales deben ser considerados como una urgencia y se debe acudir lo antes posible al dentista, que examinará al paciente y aplicará el tratamiento más adecuado. En los casos más graves, cuando la pulpa dental se inflama o se infecta, puede ser necesario un tratamiento endodóntico, a través del cual se tratará el interior del diente o se intentará mantener la dentición natural, el hueso y la encía que la rodea, así como su funcionalidad”.